Invertí algo de tiempo buscando en  Google Maps e internet la ubicación exacta del basurero de Cocula, y el largo y sinuoso camino que conduce a él. Es más fácil de encontrar de lo que pensaba, considerando que lo poco que hay en ese paisaje vacío es sorprendente. Todas las fotos que se pueden encontrar datan de las investigaciones, los estudios forenses y las cosas que sucedieron entre finales de 2014 y 2015. Antes de eso, era un lugar que nadie hubiera considerado fotografiar.

Espero que las pinturas le hagan más justicia al carácter del lugar de lo que quizá podrían dar las fotografías.